Con la actual crisis energética en Europa, marcada por el incremento de los precios de la energía y de las materias primas, ha quedado patente la necesidad de mejorar la eficiencia energética y el ahorro en electricidad tanto a nivel residencial como industrial.
Aportamos dos datos que permiten hacerse una idea de la situación en la industria, que afecta a sectores críticos de nuestra economía:
El 43% de la economía española depende de la industria.
Hay industrias cuyo coste energético puede suponer más del 50 por ciento de los costes de producción. Son las llamadas industrias electrointensivas.
Las industrias electrointensivas representan el 25% del consumo eléctrico nacional.
Estas industrias con un alto consumo energético están muy ligadas a
Sectores como el químico, siderúrgico, gases industriales, metalúrgico…
También se incluyen aquellas otras que ya han dado el paso de transformación a la Industria 4.0 y están muy avanzadas en sus procesos de automatización y digitalización, como las automovilísticas, centros logísticos, agroalimentarias, centros de datos…
Son consideradas también industrias electrointensivas las grandes empresas y entidades ligadas al sector servicios (compañías de ferrocarril, aeropuertos, hospitales, sector público…)
Autoconsumo: La necesaria apuesta por la fotovoltaica en la industria electrointensiva
Ante la situación actual, AEGE (Asociación de Empresas de Gran Consumo de Energía) alerta de la necesidad de fomentar el ahorro y la eficiencia energética, como herramientas clave para garantizar el suministro energético y la competitividad industrial a corto y medio plazo. Sin duda, el autoconsumo fotovoltaico es una de las soluciones que permiten avanzar en esta línea.
Según UNEF (Unión Española Fotovoltaica), el autoconsumo fotovoltaico instalado en España creció más del 100% en 2021. En concreto, se instalaron más de 1.203 MW de potencia fotovoltaica. Del mismo, el sector industrial ha supuesto el 41% de la potencia puesta en marcha. La novedades regulatorias favorables y los altos precios de la electricidad han influido en estas cifras. Todos los datos y análisis apuntan a que cada vez más empresas apuestan por el autoconsumo fotovoltaico industrial como medida para el ahorro y prevención ante un posible apagón o caída de calidad de red. La progresiva eliminación de las barreras administrativas y los incentivos también ayudan.
¿Qué es el autoconsumo fotovoltaico industrial?
Cuando hablamos de autoconsumo fotovoltaico industrial, hacemos referencia a consumir la misma energía que producimos. La generación de la energía solar fotovoltaica se produce en las placas o paneles solares, que suelen estar situados en los tejados o cubiertas de edificios o naves. Luego, un inversor, elemento fundamental en cualquier instalación fotovoltaica, se encarga de transformar la energía que producen las placas solares en electricidad.
Por norma general, las empresas requieren un mayor consumo eléctrico, lo que resulta especialmente rentable teniendo en cuenta que cuanto mayor es el gasto, mayor es el ahorro.